Se presume que la nueva ley con las condiciones que conlleva, viene a significar casi la prohibición de abortar, legislando los nacimientos de manera obligatoria y penalizando con dureza a las mujeres que se apliquen al aborto.
¿Quién asome el coste económico de un nuevo nacido si no se le podrá mantener por carecer de medios y recursos adecuados, o si nace con discapacidades?. Si se tiene que criar, por ejemplo, un discapacitado que necesite cuidados las 24 horas del día, ¿cómo podrá tener vivienda adecuada y adaptada, quién lo cuidará, de dónde saldrá el dinero para asumir todos los costes?. No es nada sensato tener un hijo en esas condiciones, ni se puede caer en la hipocresía social, no existen las beneficencias ni las "Madres Teresas de Calcuta" para que lo cuiden.
Claro que por un lado hay que llevar el máximo de educación sexual a la población, empezando por las escuelas, y que desde luego el aborto no es nada agradable para ninguna mujer. Pero el derecho al aborto debería de ser decisión exclusiva de cada mujer, que pudiera tomar libremente su decisión y con ello asumir su propia responsabilidad, y en este sentido la mujer está en todo su derecho. Para el hombre que no esté de acuerdo, y en especial el responsable del embarazo, mejor se busque a otra mujer a quien dejar embarazada y que ella quiera dejarse preñar.
Para lo demás, no es necesario abrir la puerta a la creación de mayores males sociales, ya que todo nacimiento tendría que venir teniendo adelante un mínimo de vida digna. Así que el aborto ni siquiera tendría que estar legislado, ya que se supone que debería de ser derecho exclusivo de cada mujer. Pero eso sí, el Estado debiera de estar para garantizar la salud de la madre y del feto, y actuar de modo más conveniente y digno para cada caso. No podemos caer nuevamente en hipocresías en tema tan serio.
