domingo, 22 de agosto de 2010

NUEVA LEY DE HIPOTECAS CON LÍMITE A 15 AÑOS, Y MEDIDAS PALIATIVAS CONTRA LOS CULPABLES DE LA ESPECULACIÓN INMOBILIARIA.

Una de las leyes urgentes que crearía si llegara a la presidencia, es sacar adelante una nueva ley de hipotecas que las limite a no más de 15 años, con alguna ligera reducción fiscal a quienes las hagan por menos años, para estimular no alargar las hipotecas, ya que el alargo de las deudas resultan fatales para las familias. De haberse hecho en su debido momento, se habría evitado la desproporcionada especulación inmobiliaria de los últimos años, que todos sabemos que ha dado resultado de consecuencias nefastas para muchos compradores e inversores de última hora, y el insultante enriquecimiento exagerado de unos pocos. De tener esta ley se habría conseguido que el libre mercado se hubiera ajustado el precio a su justa medida, contanto el valor de los costes de la edificación y algunos margenes para el legítimo beneficio de toda actividad económica, con unos precios más al alcance de todo el mundo, con un estimulo al ramo de la construcción, y con la creación espontánea del mercado de segunda residencia para aquellos cuyo poder de compra les permite disponer de más de una vivienda. Esto hubiera sido algo positivo en la estabilidad del sector de la construcción, importante motor de la economía nacional, y hubiera evitado la actual situación de que aparentemente la mitad o más de los parados registrados en España, proceden de la construcción. Por tanto, esa ley de hipotecas, debe de elaborarse y tramitarse ya con carácter de urgencia, pues sería clave para la recuperación de la economía y la creación de empleo. Y dicho esto, no puedo evitar de señalar que debido a la falta de esa ley muchos años atrás, los políticos son culpables de haber dejado a tantos millones de españoles atrapados en una insostenible hipoteca de varias décadas, para pagar una vivienda que no vale lo que realmente le ha costado su compra, así como casi dos millones de nuevos parados procedentes de la construcción, por culpa de una excesiva construcción que sólo se hacía para especular, y no para cubrir las verdaderas necesidades nacionales, aparte de dejar los precios a unos límites prohibitivos e inalcanzables para el común de los ciudadanos, que tendría que poder tener cada uno vivienda a precio accesible y justo, tal como lo estipula la Constitución como uno de los más importantes derechos ciudadanos.

Lo ha habido en nuestro país, con el tema de la vivienda, es el usurero y abusivo aprovechamiento para enriquecerse exageradamente unos pocos, en perjuicio de millones de familias engañadas y atrapadas por unas hipotecas que prácticamente podríamos calificarla de auténtico robo. Y eso, por una razón de justicia, habría que corregirlo. Estoy pensando en debatir y solicitar al parlamento que saque una nueva ley que permita condonar una parte muy importante del coste de las hipotecas, como medida paliativa para liberar a millones de familias de esta estafa de la especulación inmobiliaria.
El libre mercado, es algo muy necesario, para crear crear servicios y empleo, pero cuando se abusa de esa libertad, especulando exageradamente con el precio de las cosas necesarias para el bienestar de la población, entonces es cuando los políticos han de intervenir para corregir los defectos. No negaré que toda actividad económica persigue el legítimo derecho al máximo de beneficios, pero lo que no creo que sea algo legítimo, es el abuso, la usura, el robo encubierto, en pocas palabras. Los enormes beneficios de la especulación inmobiliaria, ha dado lugar en que unas pocas personas se permitan poder pagar los enormes sueldos de los futbolistas como Cristiano Ronaldo o Messi, tener escandalosos yates con helicóptero, evadir todo ese dinero en cuentas ocultas de los paraísos fiscales cuando nuestro país sufre crisis económica y carencia de circulación de capitales. Eso es una injusticia que debe de corregirse. Por tanto, voy a abogar por una condonación del pago de una parte muy considerable de la hipoteca, con una ley que obligue a los especuladores a devolver parte de los enormes beneficios que acumularon a costa de endeudar a millones de familias desamparadas de una justa ley de hipotecas que ahora se hace muy necesaria.No discutiré beneficios del orden de hasta un 30% de todo el coste generado en la totalidad de su contrucción y entrega de llaves al comprador, pero cuando esos beneficios son del 150% y en algunos casos hasta del 400% y más, es evidente que hemos llegado a unos límites intolerables que no debemos consentir, y por eso estoy aquí para corregir y arreglar esa injusticia con el tema de la vivienda. Voy a intentar que sea posible un acuerdo entre todos: compradores de viviendas y especuladores (vendedores), tratando de buscar un peritaje de varios expertos imparciales sobre el precio real y justo de la vivienda, y que finalmente una ley del parlamento decida sobre el cálculo de su valor correctivo. En la actualidad, y según informaciones de los expertos, tanto nacionales como internacionales, el precio de la vivienda en España todavía sigue carísimo y sobrevalorado entre un 50 y un 75% (que es lo que teóricamente debería de bajar). Voy a crear una comisión de seguimiento, para que los ciudadanos que lo deseen, presenten su historial de compra y adquisición de hipoteca, con lo que estudiar lo que le corresponde de condonación a cargo del vendedor que deberá de devolver a la familia el dinero del coste considerado como especulativo, inmoral e ilegitimo. Se inspeccionarán toda la circulación de los papeleos legales de la compra-venta y las hipotecas, para obligar a los especuladores a devolver una parte del dinero que se supone adquirieron ilegítimamente, por considerarlo como robo encubierto. Para ello voy a sacar una ley con la que congelar temporalmente las propiedades y las cuentas de todos los españoles, para que no se escapen los capitales, y a través de esta ley haré que se exigan responsabilidades a los especuladores, los cuales los que no respondan de la parte que le corresponda, procederé a embargarles sus propiedades y subastarlas para con ese dinero que deben formar un fondo con el que compensar a las victimas de la especulación. Los trabajadores son la causa del bienestar de la nación, y es de justicia que todas sus familias puedan tener una vivienda a su justo precio, y no sentirse agobiados en pagar una deuda que tan sólo ha servido para enriquecer a unos pocos que supieron aprovecharse del libre mercado y de la falta de una ley de hipotecas.

Y finalmente eso sí: voy a hacer pagar un impuesto muy fuerte sobre el precio de la contratación de futbolistas a partir de determinado precio, sobre los grandes yates, las contrucciones lujosas, los hoteles-restaurantes de 5 estrellas, y en general sobre todo aquello que suponga excesivo lujo,...con el que poder obtener una fuente de fondos que llenen las arcas del estado para pago de servicios ciudadanos de primera necesidad y como la forma indirecta de que pagen más los que más tienen y se pueden permitir los caprichos más lujosos y caros. La picaresca y la especulación a costa de los demás y en contra del bienestar común, debe de acabarse en nuestro país, y por eso necesita un estudio urgente y en profundidad.