Hoy he leído en la prensa que al parecer, los grillos panza
sobradamente satisfechos con sus bolsillos podridamente bien pagados por los
contribuyentes que componen el Eurogrupo se han puesto de acuerdo en su macabra
merienda de negros con el tema de los mal llamados "refugiados". Han
decidido repartirse 120.000 inmigrantes (casi todos musulmanes). Y ahora dicen
que en lo que queda del año 2015 van a venir y se esperan otro millón más a
acoger y repartir. La orgía de insensateces e imprudencia iniciada por la
canciller alemana Ángela Merkel está servida, y pronto nos pasarán la factura.
Claro, para Ángela Merkel y demás socios del Eurogrupo, la
emergencia a atender son los extranjeros a quienes ven como posible mano de
obra barata con la que formar el "ejército industrial de reserva" que
sus aparatos productivos pueden llegar a necesitar temporalmente, y no los
millones de parados y minusválidos de sus propios países que viven en la
pobreza y la marginación ( de esos si se han olvidado completamente, de ahora y
de siempre, especialmente los últimos años).
La "solidaria y acogedora" España, el país que
había sido de las campanas y las cruces, dice amén a todo lo que le diga Ángela
Merkel y el resto de los mandamases del Eurogrupo, olvidándose de sus raíces
cristianas y ahora buscando integrar lo no integrable: todo lo musulmán que se
cole por Europa, hasta tal punto de subvencionarles profesores o interpretes de
árabe y todo, cuando no hay ni becas ni ayudas para los hijos de los propios
españoles más necesitados. Es posible que pronto empezaremos a ver que los
ubican en los polideportivos, institutos o dependencias municipales (porque eso
se desbordará y nadie querrá acogerlos en sus casas). Ahora bien, el Estado, es
decir, mediante el pago de sus impuestos, los ciudadanos del país obligado a
acogerlos tendrán que hacerse cargo de su supervivencia, es decir, pagarles su
sanidad, su educación, los servicios de justicia de los tribunales, y como el
mercado laboral está seco, como ocurre en España, inevitablemente una mayoría
de inmigrantes no encontrará trabajo (tanto porque generalmente son como
analfabetos sin formación y sin conocer bien el idioma como por no conocer bien
las costumbres del país de acogida) y habrá que darles un subsidio indefinido
para sobrevivir y poder comer, mientras que los demás más afortunados quitarán
los puestos de trabajo a los autóctonos, contribuyendo por otro lado a la
bajada generalizada de salarios. Eso significará con toda seguridad un par de
cosas: subida inevitable de impuestos, y mayores complicaciones para la
convivencia. Todo esto en el corto plazo, ya que en lo del medio y largo plazo
vendrá lo peor.

Naturalmente eso provocará un "efecto llamada"
cada vez peor haya o no haya guerra en Siria ( de momento la excusa que más se
repite para poder entrar a Europa ), porque si en este año en Europa entran un
millón, como dicen estar esperando los del Eurogrupo, posiblemente dentro de
dos años sean cinco millones, y dentro de cinco años pueden ser 20 ó 30
millones los que estén esperando entrar por la fuerza a las puertas de Europa,
ser acogidos y ser repartidos por supuestas cuotas entre los diversos países,
ya que para ellos Europa donde obtienen tantas cosas gratis y asistencia del
Estado es lo más parecido a un paraíso, donde por lo menos en cada pueblo hay
una fuente donde beber agua, mientras que en sus lugares de origen ese es un bien
tan escaso que supone horas y muchos kilómetros encontrarlo, sólo por citar un
ejemplo entre las miserables condiciones de vida de un lugar de África o Asia
siempre en permanente conflicto y los beneficios que se obtienen en el
"paraíso europeo". Y eso procedentes de una África y una Asia que
cada año suma su propia población por varios millones de habitantes más. Y toda
esta entrada continuada de inmigrantes llegará a un punto donde ya no se podrá
aguantar más, y se hará desbordable.
Eso conllevará que poco a poco y sobretodo en las grandes
ciudades europeas las bolsas de paro y pobreza cada vez aumentarán más y más, y
de forma masiva y descontrolada. Las noticias de desembarcos masivos y
continuados en las playas será algo diario como ya estamos viendo casi todos
los días, los asaltos a vallas como las de Melilla pronto se convertirán en lo
más parecido a los asaltos a castillos medievales en pleno asedio, y los
túneles cómo el de la Mancha, pronto se convertirán en ratoneras con
infiltraciones continuas de topos humanos en cualquier camión o vehículo, ante
esa marea humana que será prácticamente imposible de administrar y controlar, y
menos ante la manifiesta y demostrada pasividad política tal como la hemos
visto hasta ahora. Inevitablemente pronto se acabará el dinero de todas esas
ayudas sociales para comprar la paz inmigratoria, y a partir de aquí empezará
lo peor, que por tanto pretender repartir "derechos humanos", los
derechos inevitablemente pararán a ser "inhumanos" empezando por los
estamentos más desfavorecidos. Eso
llevará a tensiones y conflictos cada vez más lamentables, que inevitablemente
Europa empezará a despertar y reaccionar ante ese gravísimo problema social, y
los partidos anti-inmigración poco a poco serán los más votados y se irán
haciendo con el poder. Y dado que las fuerzas policiales y antidisturbios serán
insuficientes para controlar toda esa cada vez mayor entrada masiva de
inmigrantes que evidentemente no se integrarán en ningún pueblo o ciudad
europea, no quedará otro remedio que sacar lo que quede del ejército por las
calles, y los países europeos se convertirán en unos países militarizados, como
un calco de Israel donde se ven soldados por todas partes, o algo mucho peor.
Todo eso inevitablemente traerá un cierre hermético de las fronteras, y
posiblemente campos de concentración para derivar a toda la inmigración
sobrante y estorbante, de lo cual ya tenemos triste recuerdo. Y es posible que
todo esto y más pueda ocurrir por Europa antes de que pasen 10 años.

Me temo que todo esto podrá llegar a ocurrir si ahora no se
toman con toda rapidez las medidas necesarias y se frena ya de una vez por
todas esa invasión inmigratoria imparable (en su inmensa mayoría con
mentalidades muy opuestas a las europeas) , se devuelve de donde salieron a
todos los que entraron, y se quitan todas esas ayudas sociales que en realidad
buena falta hacen para los ciudadanos autóctonos caídos en desgracia y en el
desamparo social.
Porque si no lo evitamos a tiempo todo eso llevará a la
radicalización de la sociedad, en la que los autóctonos defenderán a ultranza
sus intereses nacionales y los inmigrantes tratarán de adueñarse de todo lo
posible en favor de sus propios intereses, con lo cual no tendrá otra remedio
que una solución militar, donde se incluirá la guerra de guerrillas y los
violentos disturbios callejeros tal como los conocemos hasta ahora nos parecerá
un simple juego de niños. Y inevitablemente el desempleo, la pobreza, la
violencia será cada vez más extendida, empezando a haber cada vez gente más
hambrienta, enferma y desesperada, que no podrá ni ser atendida en la
"civilizada Vieja Europa". Y es posible que otras potencias militares
extranjeras o terroristas se aprovechen de la situación para llevar la guerra a
la propia Europa y convertirlo en un territorio satélite de sus propios
intereses políticos.
Pero si la cosa se desborda y empeora tal como se prevé, creo
que por entonces una posible solución internacional será crear una especie de Estado
en algún lugar de África o de Asia, o en alguna isla grande poco habitada, como
Madagascar o cualquier otra que reúna las características, que bajo algún tipo de protectorado de la ONU
o de la Unión Europea, se deporten a todos los millones de inmigrantes que han
entrado en Europa los últimos años, igual como se crearon los estados de Israel
para acoger a los judíos sobrevivientes perseguidos por los nazis, o Liberia
para acoger a los negros inadaptados de Estados Unidos. Porque es evidente que
si somos un continente civilizado donde se respetan los derechos humanos no
podemos matar ni exterminar con una solución al estilo nazi como ocurrió con
los judíos hace más de 70 años, a toda esa gente que representa un peligro muy
grave para nuestra propia supervivencia, no sólo por ser incompatibles con
nuestra cultura y modo de ser, sino además por los gravísimos problemas de
desempleo, pobreza e inseguridad que conllevarían, pero sí podemos deportarlos a otro lugar
donde inicien otra nueva vida, con sus propias culturas, creencias y modo de
vida, y sin ser un peligro ni un estorbo para la paz, convivencia y progreso de
la propia Europa.
No sé qué pasará exactamente; es una simple previsión ya que
no tengo la bola de cristal con la que poder ver el futuro, pero desde luego no
pinta nada bueno, y si Europa sigue igual de pasiva como hasta ahora, creo que va
camino a su propio suicidio. A la par, mal-sobrevivirá.