Pablo Iglesias ( PODEMOS ), en plena negociación por la
investidura de Pedro Sánchez, pide una vicepresidencia y los ministerios claves
para convertir a España en un "Estado policial" aprovechando sus
instrumentos para sus intereses políticos, con el control del CIS, el CNI y el
BOE, y con carteras claves con las que controlar las policías, los militares y
la Guardia Civil ( porque no olvidemos que aparentemente, quien controla los
organismos armados, indirectamente controla la totalidad del país y aplicando
la censura si conviene en los medios de comunicación, en especial las
televisiones, como si fuera una dictadura encubierta). Aparte se ve a las
claras que su otro objetivo es dividir y romper España, empezando con lo de celebrar
un referéndum en Catalunya que decida sobre su separación, y por otra parte
también busca que entren sin control en España todos los inmigrantes que lo
deseen (en especial los de origen musulmán) como otra forma de desestabilizar
el país y tener más fácil lo de mantenerse en el poder.
Naturalmente para los del PSOE (que necesitan los votos de
PODEMOS si quieren conseguir que Sánchez sea presidente) se lo toman como quien
ha perdido el norte, a pesar de que siguen perdiendo el tiempo cortejando con las
formaciones afines a Pablo Iglesias, para conseguir la presidencia del gobierno
a cualquier costa y precio.
Pues ante unas condiciones negociadoras así, todo apunta que
será complicadísimo que se pongan de acuerdo (cuando no imposible), sobretodo
por la presión de los barones socialistas a los que no convencen las maneras
dictatoriales de PODEMOS, con que se que nos avecinan unos meses de
inestabilidad política e ingobernabilidad (con todo lo que representa de
incertidumbre económica, y aún suerte que formamos parte de la zona euro,
porque si no sería peor), y muy posiblemente nada más comenzar el verano
tendremos nuevas elecciones.
Lo malo es que según señalan las encuestas, los resultados electorales y el escenario
político puede volver a repetirse y venga a durar la ingobernabilidad no sé
cuánto tiempo, con la pérdida, también, de la oportunidad de una gran coalición
PP-PSOE-Ciudadanos, que sería lo más conveniente en esos momentos, dadas las
circunstancias.
Con un poco de suerte, la opción de los identitarios (al
estilo del Frente Nacional francés) que el sindicato Manos Limpias, así como
las tres organizaciones políticas Partido por la Libertad, Plataforma por
Catalunya y España 2000, presentan como alternativa política unitaria (son
grupos políticos patriotas y anti-inmigración descontrolada, para quienes los
intereses de España y los españoles son lo prioritario frente a otros elementos
extranjeros y ajenos a nuestro propio país como es el caso de la inmigración
musulmana, entre otros), puede ganar tiempo y hacer que sean posible sus
candidaturas en la próxima contienda electoral para representar a esta
importante parte del electorado que no se siente representado por ninguno de
los actuales partidos políticos con representación parlamentaria.
Con todo, si no es posible un gobierno de coalición PP-PSOE-
Ciudadanos, presidido como es lo más razonable por el candidato del partido más
votado, lo mejor es que se anticipen las elecciones.