martes, 21 de junio de 2011

BIBLIOTECAS VIRTUALES Y LIBROS ESCOLARES



Hubo un tiempo en que las bibliotecas, lugares donde estaban depositados los saberes de la humanidad, tenían tanto valor, que por ejemplo, en la Antigüedad, durante la guerra civil de Alejandría, la reina Cleopatra Séptima Tolomeo, lloró intensamente ante el dictador de Roma Cayo Julio César, cuando supo que se había incendiado la mayor biblioteca del mundo conocido desde entonces. Tanto dolía esa perdida que por ello tuvo que llorar quien era considerada como la dueña absoluta de vidas y de haciendas de todos los egipcios, pero César la consoló prometiéndole que le facilitaría copias de los rollos depositados en la biblioteca de Pérgamo, la segunda más importante después de la de Alejandría.

Lejos han quedado aquellos tiempos en los que un jovencísimo Abraham Lincon (que llegaría a presidente de Estados Unidos) tuvo que comprar unos viejos libros llenos de polvo carcomido por los lados, y leerse los libros que trataban sobre Derecho a la luz de una modesta vela por la noche. Hoy en día tenemos internet para leer todo lo que se desee, y desde que Isaac Newton dijera aquello de que basta conocer las 28 letras del alfabeto para aprenderlo todo, ha llovido mucho. En las escuelas lo que deberían de enseñarse de modo prioritario y especial, es el uso de la informática y de cómo sacar provecho de todas las utilidades de internet, para que este se convierta en una herramienta útil para todo el que quiera aprender por cuenta propia,

Ahora con el advenimiento de internet en todos los sectores de la población, hace falta un cambio de roles, que debe de ayudar a reducir el gasto público en cuanto se refiere a impuestos, y el gasto familiar en cuanto se refiere al gasto escolar por compra de libros de texto en cada nuevo curso. La eliminación de las bibliotecas públicas será una de las medidas para ayudar a paliar el endeudamiento y bajar algo los impuestos.

Con internet casi al abasto de todos los hogares españoles (y además debería de estar subvencionado, o por lo menos abaratado considerablemente), las bibliotecas llegan a constituir un servicio público completamente inútil, aparte de los costosos gastos que supone la habitual y continuada adquisición de nuevos libros y demás material (DVD, CD, revistas, periódicos, ordenadores, etc…), el mantenimiento y conservación de los viejos, el mantenimiento de los edificios ( y con ello sus gastos de reparaciones, cuidado, luz, agua, calefacción, teléfono, papel y jabón para el water, etc….), los gastos de sueldos del personal de la misma: bibliotecarios, auxiliares, conserjes, personal de limpieza, personal de mantenimiento, etc…, que en todo el año supone un gasto de muchos millones de euros que inevitablemente salen de los impuestos que pagan los ciudadanos ( y lo que es peor: sólo aprovechan las clases pasivas que apenas nada aportan en los impuestos, pues ni está abierta las 24 horas del día, ni los 365 días del año). Propondría que se digitalizara todos los saberes, de prácticamente todo lo que hay en todas las bibliotecas del país y las internacionales que voluntariamente se prestaran para este objetivo, sean libros, revistas, documentos, películas, música, etc…, para ponerlo en una gran web que la llamaría algo así como LA BIBLIOTECA VIRTUAL NACIONAL, y desde la cual pudiera descargarse cualquiera de todas esas cosas que usamos o nos llevamos prestado de las bibliotecas.

Lo mismo para el caso de los libros de texto escolares: digitalizarlos y ponerlos en esa biblioteca dependiente de alguna oficina del gobierno (podría ser cultura o educación), y de esta manera los ciudadanos podrían gratuitamente descargar todo ese material aplicable en cada uno de los cursos de las escuelas, lo que aliviaría mucho el gasto familiar, aparte de que favorecería el medio ambiente al ahorrar en libros-papel.

La idea de sus utilidades ya está en internet, donde podéis mirar y descargar bastante material educativo y de entrenimiento u otras aplicaciones, pero falta que se ponga más desarrollado, con más facilidades y más al abasto de todos. Una cosa muy a tener en cuenta, que por un lado favorecería mucho el fomento de la cultura y la educación, a través de la gran herramienta internet, y por el otro se ahorrarían muchos miles de millones en impuestos por la parte que le toca a los españoles.

Como ejemplo de lo que estoy hablando, os adjunto unos cuantos enlaces donde podréis encontrar un tesoro de lecturas gratuitas, sin tener que desplazaros a bibliotecas públicas, librerías o kioscos. Un abasto ilimitado de cultura. Y es que con internet, quien no lee es porque no quiere:

http://www.ellibrototal.com/ltotal/

http://youkioske.com/


http://www.bajatextos.com/listado%20completo%20de%20libros.html

http://youkioske.com/libros

http://formarse.com.ar/

Considero que el libro más importante que no debería de dejar sin leer ningún español, os lo adjunto aparte. Se trata de esta joya de la literatura española escrita por Miguel de Cervantes Saavedra, titulada “EL INGENIOSO HIDALGO DON QUIJOTE DE LA MANCHA”. De ello, recomiendo abráis todos los iconos, no tiene desperdicio y si no controlas el español antiguo solo tienes que pinchar en el icono "T" y te lo traduce:

http://quijote.bne.es/libro.html



También os adjunto unos cuantos enlaces donde podréis ver o descargar películas de cine o series de televisión, sin necesidad alguna de acudir a pedir prestadas en bibliotecas o alquilarlas en video-clubs:


http://www.divxonline.info/peliculas-estreno/1.html

www.cinegratis.net/index.php

www.dospuntocerovision.com

www.veocine.es

http://www.soloseries.tv/



Y finalmente para que tengáis casi todo lo imprescindible a mano, sin necesidad de acudir a biblioteca alguna, os adjunto además esta interesante y útil página web multiusos:

http://www.alaup.com/

Aparte de que con programas como Ares podéis encontrar y descargar todo lo descargable que haya por internet, sean libros, películas, música, documentos, etc….



Como podréis entender, se podrían ahorrar miles de millones anuales, que se podría destinar, por ejemplo, a la creación de puestos de trabajo, que más falta hace.

Y si antes se tenia que ir a una biblioteca, rogar que te prestaran el libro, y aún muchas veces te ponían las mala caras propias de los funcionarios que duermen sobre sus enchufes, hoy las cosas poco a poco van cambiando y te dejan material de sobras y por largo tiempo ( el caso es que a causa de las utilidades de internet, cada día sobran más lectores-ratones de biblioteca, y cada día van menos usuarios, porque toda la información que buscan en la biblioteca, la encuentran en internet). Hoy la cultura y el conocimiento es ilimitado y accesible a todo el mundo a través de internet: ya no son necesarias las bibliotecas públicas, salvo que se reconviertan en una especie de museo-almacén de libros, que sean financiadas por entidades o fundaciones privadas, sin coste alguno para el pagador de impuestos.

Pero esa medida que nos ahorraría muchísimos miles de millones anuales, debería de ir acompañada en antes hacer que el wifi (internet sin cables), llegara a todos los rincones del país, como ocurre, por ejemplo en la capital de la provincia de Zamora, o en bastantes lugares de Europa, que además es gratis y el costo del Estado es ridículo en comparación a su gasto en bibliotecas. Hoy en día es fácil encontrar un buen portátil pequeño, por apenas unos 200 euros, con conexión a internet desde cualquier parte adónde llegue la señal de wifi, un coste en muchos aspectos mucho más reducido que lo que hay que gastarse en libros y demás material escolar en los comienzos de cada nuevo curso.

Entiendo que los bibliotecarios van a poner el grito al cielo, y se van a ir al paro, pero nuestro país necesita una economía que no sea basada en funcionarios que no aportan nada productivo ni compiten, y encima deben de ser mantenidos con los impuestos. Nuestro país necesita puestos de trabajo que de verdad sirvan para crear riqueza y ser útiles al resto de este mundo globalizado. Y si hay que fomentar el empleo productivo y reducir los gastos innecesarios, las bibliotecas es una de las cosas que ya pueden empezar a eliminarse. Por otra parte, ¿no seria más justo e inteligente, por ejemplo, emplear el dinero que se despilfarra con las bibliotecas en fomentar el empleo en centros especiales de trabajo para minusválidos, que son uno de los que más sufren los efectos de la crisis y más olvidados de atención están? . Es decir, en vez de despilfarrar inútilmente, destinar ese dinero en ayudar a los más necesitados y que más dificultades lo tienen con el desempleo y la crisis económica.