Un interesante documental de la BBC que nos muestra
cómo ven la crisis española desde Inglaterra.
Un documental muy
ilustrativo, muy recomendable para tomar
conciencia de la dramática situación que nos toca afrontar para poder salir
adelante en los próximos años. Al final lamentablemente, la conclusión del
documental es muy dura: la emigración de miles de jóvenes españoles (los más
preparados), así como lo mejor de la mano de obra española más laboriosa, a
otros países que pueden ofrecer más y mejores oportunidades que la propia
España, estancada en lo funcionarial y sólo soportando las empresas que tienen
monopolizados los servicios básicos de la sociedad española. Podemos ver, por
ejemplo, que a partir del minuto 25:00 se muestran los escandalosos
despilfarros realizados en zona de Valencia, mientras algunos de sus colegios tienen
instalaciones tercermundistas. En el minuto 29:30 sale, ¡cómo no!, el
mundialmente famoso aeropuerto de Castellón, el colmo de todos los
despilfarros, inaugurado por el entonces presidente valenciano Francisco Camps.
Casi todo el contenido de este vídeo "pone los pelos de gallina"
sobre cómo han dejado nuestro país tras años de corrupción, de nefasta gestión
y de despilfarro descontrolado de los recursos públicos por parte de las
distintas administraciones y los partidos políticos de todos los colores. Así
como también podemos ver toda la conflictividad, y las manifestaciones
derivadas de los males sociales causados. En el minuto 35:30: sale el
presidente Zapatero diciéndole a los inversores y banqueros de Wall Street que
España "tenía el sistema financiero más sólido de la comunidad
internacional", y que "ha tenido un marco de regulación y de
supervisión reconocido internacionalmente por su calidad y rigor" (¿ y
cómo se explica esto de que ahora estamos con casi todas las cajas quebradas y
nacionalizadas? )... parece claro que seguir las “clases de economía
en dos tardes” y presentarse a las
Cumbres Internacionales diciendo que tenemos los bancos más saneados del mundo
y que pronto alcanzaremos a Francia e Italia en el ranking de los mejor
situados económicamente a nivel mundial, ha terminado por provocar efectos
alucinógenos y campos de distorsión de la realidad, cuyo legado ha tenido que
recoger el presidente Mariano Rajoy; en
fin..., esa era la maravillosa España de Zapatero en la que se regalaban 2500
euros a cualquiera que pariera en España sin distinción de nacionalidad, cuando
ahora no hay ni dinero para pagar los medicamentos que prescribe la seguridad
social a los propios españoles. La verdad es que como ciudadano español siento vergüenza de todo esto y de que así
nos vean por el resto del mundo, pero la verdad, todavía me queda algo de
orgullo de ser español a pesar de los mangantes que nos gobiernan, y que no
hacen absolutamente nada para arreglar el paro y frenar la inmigración.
Qué
diferencia con los tiempo de Franco, que supo arreglar el
desastre que le dejó la República y la Guerra. Se dice que
económicamente hablando a final de los años cincuenta España estaba en quiebra,
hasta que un grupo de tecnócratas del Opus Dei escogidos por el propio Franco
llevaron a España a la séptima potencia industrial del mundo, con crecimientos
anuales por encima del 7%, y con lo que ello supone de creación de empleo,
sentando las bases para crear en nuestro país una sólida clase media que hoy
por hoy está en vías de desaparecer, ampliando el abanico de las diferencias
sociales. Hay que reconocer que tan mal no lo hizo Franco pues delegó las
decisiones económicas en gente que realmente sabía de economía, y no
necesariamente la aprendida en dos tardes al estilo de Zapatero, y a base de
innumerables normativas y cada día más extendidos impuestos. En comparación,
con Franco apenas habían impuestos ni normativas, y se dejaba trabajar a
cualquiera que tuviera ganas, de modo que incluso el más tonto del pueblo
montaba su propia empresa, y si se la curraba bien, le daba incluso para poder
tener su propio chalet en la playa o en la montaña.
Los tiempos han
cambiado, y el propio enemigo lo tenemos dentro: casta política corrupta y
apoltronada, entidades financieras irresponsables, corruptos, sinvergüenzas,
timadores, y demás ralea de bribones,…..tan abundantes entre la clase política,
judicial, funcionarial, financiera y empresarial. Se hace necesario reformar el
país de arriba abajo, abolir numerosas leyes y normativas que ponen difícil la
creación de puestos de trabajo, abolir impuestos, adelgazar el enorme aparato
burocrático, priorizar los intereses nacionales frente a la inmigración,
etc…Vamos a una economía de subsistencia, y nos falta recuperar ante todo los
valores de la honradez y la honestidad, el sentido común, y la competitividad
de aspirar en ser los mejores. Pero lamentablemente, los ingleses, autores de
ese documental, lo mismo que el resto del mundo se van a aprovechar de nuestras
debilidades, y en este sentido, con toda razón, “Spain is diferent”. Ese
documental, naturalmente, no lo podían hacer un equipo de reporteros españoles.
Tenía que ser la imparcialidad internacional que nos permitiera poder ver más
claramente nuestro propio ombligo.